Liam Cameron está convencido de que ha muerto y ha llegado al cielo cuando abre los ojos, se despierta en un convento y ve a un ángel ante él. Pero al notar el dolor que le recorre todo el cuerpo, se da cuenta de que sigue en este mundo. El ángel es en realidad una dama decidida y enérgica, Keira Murray, que acaba de salvarle la vida con sus cuidados. A Liam se le ocurren unas cuantas maneras de darle las gracias. Keira es una joven viuda que huye de los invasores que han atacado sus tierras, y conquista hasta los monjes del convento con su valor y honestidad. Su mayor preocupación es liberar a los habitantes de sus tierras del yugo del tirano que mató a su marido para usurpar su lugar. Liam está dispuesto a luchar contra todo y contra todos para ser merecedor de su confianza...y de su amor.

Se trata del segundo libro de la saga El clan de los Cameron. Serie directamente relacionada con la saga dedicada a la familia Murray.

Liam Cameron a duras penas ha llegado con vida al monasterio en donde se encuentra su primo Matthew. Semiinconsciente y golpeado, observa extasiado a la mujer que atiende sus heridas en una pequeña casita próxima al monasterio. Keira también había debido recuperarse de unas importantes heridas que a punto habían acabado con su vida. Ahora, permanecía escondida decidiendo como recuperar Ardgleann del malvado y terrorífico usurpador que estaba acabando con las vidas de aquellos que formaban parte de su propiedad. Para Liam la joven es todo un reto. Desea que vea algo más que su apuesto rostro. Pero, no cree encontrarse a su altura. Él no posee riquezas que puedan igualar a las de la joven Murray. Sin embargo, desea ser su paladín. El hombre que le ayude a recuperar Ardgleann. Pero, un obstáculo se interpondrá pronto en su camino. La llegada de Lady Maude Kinnard al monasterio buscando supuestamente a su amante herido hará caer en picado el concepto que Keira tiene del Highlander. Huyendo del enardecido laird Kinnaird, se dirigirán a Scarglas buscando protección, descanso y, sobre todo, hombres para liberar a Ardgleann. Pero no contaban que la estancia de ambos durante un mes, solos en una cabaña, no iba a ser bien acogida ni por los Cameron ni por los Murray. Sin poderlo evitar deberán contraer un matrimonio no visto con buenos ojos por Keira. La imagen de hombre lujurioso que tiene Keira de Liam no la ayuda precisamente a aceptar al imponente Cameron. Con las importantes alianzas establecidas, y el odio imperante en parte de las Highland contra Rauf de Moubray, ambos clanes aunaran esfuerzos para devolver la tranquilidad a Ardgleann.

Se trata de una novela sin grandes pretensiones, algo previsible y con un comienzo un poco lento. Me esperaba más del imponente y extremadamente apuesto Liam. La historia creo podría haber dado mucho más de si. Vuelve a salir Sigimor, el protagonista de la primera novela de la saga, con su tranquilidad, paciencia y astucia. Hay personajes interesante de los que una desea leer más. Sobre todo, de Artan y Lucas, los impresionantes hermanos de Keira. También me pica la curiosidad sobre la apasionante historia de Ewan y Fiona. Incluso hay otros secundarios que aportan interés en la historia como son Sir Archibald Kerr, un caballero prácticamente ciego tras una pelea, y Krester, un novicio que ha huido del monasterio y de una vida que no desea, buscando una vida más feliz al lado de Liam y Keira. Y, como no, dada la fama de Liam era necesaria una amante dispuesta a todo y un esposo enardecido, deseoso de acabar con la vida del hombre que le ha convertido en cornudo. La acción contra el malvado Rauf transcurre en pocas páginas, a diferencia de lo extenso que resulta el tiempo que permanecen en la cabaña y en Scarglas. De todos modos, aunque me gustó más la primera novela de la saga creo que este libro también merece la pena ser leído. Eso sí, que nadie busque una novela inolvidable, pues os aseguro que no lo es. No aporta nada nuevo. Sale el típico matrimonio forzado por las circunstancias, amantes despechadas, lairds furiosos, el típico malvado y un clan unido antes las injusticias. Como ya os he dicho es una novela entretenida, divertida en ocasiones, con buenos diálogos, pero nada más.

La puntúo con un 3.5 sobre 5.