Leer La bahía de la escocesa ha sido para mí un "volver a mi hogar", reencontrarme con ese tipo de libros que me encanta y que hace que me enganche a la novela romántica.

Es una historia de lo más sencilla, con un argumento de lo más corriente y, sin embargo, ha sido todo un placer leerla. Me ha hecho reír, me ha hecho sentir ternura, me ha mantenido intrigada y me ha enamorado su protagonista masculino.

Diría que es un estilo a Brumas, aunque más dinámica. La comparo con los Malory. La bahía de la escocesa es una historia sin complicaciones, con muchísimos personajes secundarios que dan un toque muy divertido a la novela. Las abuelas (lo que me han hecho reír con sus sales y con su "¡Qué vergüenza!), el mayordomo, los hermanos del prota, el perro de ella... geniales, todos geniales.

Me quedo con ganas de leer la segunda entrega de la serie, que ya aquí se deja en el aire una historia por contarse, con un atraco sufrido por uno de los hermanos del protagonista a manos de una misteriosa ladrona. Tengo unas ganas locas de tener en mis manos el segundo libro de la serie.

Este es el tipo de novela romántica que quiero leer, que no me cansa, que siempre es bienvenida. No quiero innovaciones raras... Yo quiero más novelas como ésta, sencilla, romántica, tierna, divertida y con su puntito de intriga o aventura.

En definitiva, para mí es un libro recomendadísimo.