Siempre he tenido debilidad por las novelas de Ana R. Vivo porque creo que es una de las autoras españolas que mejor sabe manejar las tramas de suspense en sus libros. Y como no podía ser de otra manera, Girasoles para Alba me ha parecido una historia entretenidísima que me reafirma en mi opinión sobre su escritora.

Es una novela no demasiado extensa, que no se hace pesada en ningún momento. La verdad es que me la he leído en un suspiro porque la forma de narrar de Ana R. Vivo es ágil, directa y, otra de las cosas que la caracteriza, es que engancha desde las primeras páginas. No creo que se trate de una joya de la novela romántica, pero cumple perfectamente su cometido de hacer pasar unas estupendas horas de lectura y, además, te deja con un buen sabor de boca. ¿Qué más se puede pedir?

Esta historia tiene un poco de todo: intriga, mafiosos, un argumento muy bien hilado hasta el final; un toque de humor, química entre sus protagonistas, pasión, romanticismo y un precioso final de los que me gustan a mí.

El protagonista masculino me ha encantado y está en la línea del tipo de héroes que me suelen gustar en la novela romántica, protector, un poco áspero… pero cuando su fachada de tipo frío va desmoronándose, descubrimos a un hombre que se entrega por completo cuando ama de verdad.

Alba es una chica normal que piensa que no es gran cosa; un poco ingenua y torpe, pero también cabezota, aunque cae rendida bajo los encantos de Massimo.

En definitiva, Girasoles para Alba es una novela amena que me ha hecho pasar un agradable rato de lectura.