Beatrice está demasiado ocupada ejerciendo de carabina para la testaruda de su sobrina Emily como para encontrar tiempo para buscarse un amante... hasta que una noche en un baile de mascaras, un desconocido le hace darse cuenta de los placeres que se ha estado perdiendo.

Sin embargo, cuando descubre su identidad, cualquier aventura con él se torna imposible. Se trata de Gabriel, marqués de Thayne, la atracción de la temporada. Pero Beatrice ha cautivado por completo a Thayne, que comenzará a sospechar que bien podría ser la esposa perfecta para él.

Acabo de terminar de leérmela y la valoro como Muy buena.

Me ha sorprendido gratamente, nunca había leído nada de esta autora y tengo que decir que, si bien la novela es bastante ligera y cortita, uno se puede quedar satisfecho con ella.

Tiene mucha pasión, sin duda, pero lo que más me ha gustado es todo los tópicos que se rompen en ella.

La protagonista es mayor que él, viuda y con dos hijas. Creo que es lo que más me ha gustado, porque a menudo me preguntó por qué siempre el mismo tema con las novelas históricas.

Es una historia preciosa, de dos personas que se enamoran y tienen que superar muchos convencionalismo. Me sorprende como en aquella época se considera a una mujer de 35 años como a una vieja, una persona a la que aún le queda mucho por vivir y mucho por dar.

Yo la recomiendo, sin duda, sobre todo para aquellas personas que están cansadas de los mismos tópicos y quiere probar con algo nuevo.