El duque de las Highlands

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Detalles del libro

ISBN-13
9788496952386
Subgénero
  • Romántica histórica
Fecha
18 de Mayo, 2009
Editorial

Libro 2 de la serie "Clan MacKenzie"

Una mujer de principios… Un hombre de pasiones.

Juliet White, nacida en la Colonias Americanas, viaja hasta Escocia para encontrar a su sobrina, la hija de su difunta hermana. En su búsqueda, llegará hasta el castillo del descarado y mujeriego Lachlan MacKenzie, duque de Ross. Allí se convertirá en la institutriz de las cuatro hijas ilegitimas del sensual escocés, todas concebidas en una corta y desenfrenada temporada en la Corte.

Juliet sospecha que su sobrina es una de ellas pero no sabe exactamente cual. Así, se adentrará en el pasado familiar del duque para encontrar la respuesta a este misterio… Mientras, las niñas irán haciéndose un hueco en su corazón.

Pero Lachlan no es un hombre capaz de dejar que una joven y hermosa mujer conserve la inocencia bajo su techo, y cuando se conviertan sus juegos de seducción en profundo deseo, intentará por todos los medios conquistar a Juliet. Ésta, a pesar de sus reticencias iniciales se verá incapaz de resistirse a los prohibidos placeres del hombre que sedujo a su hermana. No pudiendo oponerse al salvaje deseo, se sumergirá en un mar de pasiones, cuyas aguas quizás sean demasiado turbulentas para conducirla a una orilla segura.

¿Es un libertino empeñado en seducirla… o el noble que ganará su corazón?

Opiniones de los usuarios

1 opinión
Valoración
 
4.0(1)
Francamente interesante
Valoración
 
4.0
Me gustó el título y me gustó aún más el argumento, por eso cuando me tentaron a hacer una corta crítica de esta novela no me lo pensé dos veces y a eso voy, pidiendo disculpas a las más versadas si no me sale como yo quisiera.

Juliet White es americana, de las Colonias. Su hermana tuvo una hija y ella no sabe quién es pero desea conocerla fervientemente, es por eso que se embarca en una aventura que la lleva hasta las tierras Escocesas. Ay, no me importa decir que a mí todas las novelas ambientadas en Escocia ganan ya un puntito a su favor.

Juliet, siguiendo las pistas para descubrir a su sobrina, acaba en la residencia de un libertino total, un seductor que embaucó a su hermana, un hombre por el que ella no daría una moneda pero consigue fascinarla y envolverla a pesar de su resistencia inicial.

Lachlan MacKenzie, duque de Ross es ese hombre cínico, duro y frío en apariencia, que a la vez es un seductor de nacimiento. Juliet se emplea en su casa como institutriz de las hijas de Lachlan, todas ellas ilegítimas. Una de ellas puede ser su sobrina, está casi convencida.

Hay intriga y misterio en esta novela. La protagonista tiene que encontrar el libro del clan en el que se anotan los nacimientos y averiguar cual de las hijas del duque es la que engendró con su hermana.

Me atrapó la historia desde el principio por el lugar, la ambientación y los personajes. Me preguntaba si la aparición de las hijas del escocés sería buena o mala, no en todas las novelas que he leído la presencia de niños está bien narrada, algunos resultan pedantes, demasiado listos o insoportables. Por fortuna aquí no ha sido así.

La manera de ser del héroe es más, mucho más que la del sempiterno seductor que se lleva a todas a la cama porque aunque, al principio, da la impresión de que nos hallamos antes un tipo demasiado rudo con los sirvientes, luego resulta ser un pedazo de pan. Quiero decir, un hombre que esconde sus sentimientos tras una coraza.

Francamente interesante, con una forma de narrar que atrapa, unos paisajes deliciosos, protagonistas que gustan y secundarios totalmente interesantes.
L
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