Caroline Trent tiene que escapar de la casa donde vive luego de enfrentarse a Percy, el hijo de sus tutores, quien intenta propasarse con ella para comprometerla, a partir de lo cual se desencadenarán una serie de sucesos que la llevarán hasta Blake Ravenscroft, quien la confunde con una espía y la secuestra.

A partir de ahí, desarrollan una relación intensa, que inicialmente parte con una especie de enemistad y luego da paso a una súbita atracción y a una serie de encuentros y desencuentros.

Debo decir que como lector recurrente de Julia Quinn, en general la novela me ha gustado, aunque considero que no llega a ser de las mejores de la autora. Es ligera, divertida, con momentos cumbre muy buenos y el estilo inconfundible de Julia, pero siento que algo me ha faltado en el desarrollo del romance... quizás si hubiera ido más despacio en algunos momentos o hubiera alcanzado más profundidad.

Sin embargo, he disfrutado mucho de su lectura, me he reído y obtenido lo que suelo encontrar en los libros de la autora en general.

Caroline es un personaje femenino muy bueno. Me ha encantado su forma de afrontar las adversidades de su vida, con entereza, buen humor y una capacidad de adaptación impresionante.

Y Blake es un personaje que me gustó mucho, aunque hubiera aprovechado más todo su arco para profundizar aún más en sus sombras y todo su dolor.

La dinámica entre ambos es tirante inicialmente, para luego dar paso a un anhelo que trasciende el libro hasta que ya termina por explotar toda la pasión y el romance que buscamos.

Me ha encantado James como personaje secundario. Leerlo aquí me dejó con muchas ganas de leer su libro. Amé cuando pone a Blake contra la pared para que se decida, y me gustó el desarrollo de su amistad con Caroline.

En síntesis, disfruté bastante del libro, pero siento que podría haber obtenido un poco más del desarrollo de la trama y del romance.

Hasta que llegue a la mayoría de edad, Caroline Trent vive a merced de Oliver Prewitt, su codicioso tutor, y de su repulsivo hijo Percy. Cuando Percy intenta seducirla violentamente, Caroline huye y decide esconderse hasta el momento en que pueda tomar posesión de sus bienes. Pero no le será tan fácil: Blake Ravenscroft la confunde con una espía de Prewitt y la secuestra.

Caroline Trent se ha visto obligada a vivir con distintos tutores desde el fallecimiento de sus padres, pero cada uno de ellos ha resultado peor que el anterior. Ahora está viviendo con Oliver Prewitt y su hijo Percy y la situación lejos de mejorar ha empeorado, puesto que ambos han tramado la forma de quedarse con la herencia de Caroline. Para ello Percy tendrá que seducirla a la fuerza; sin embargo Caroline será capaz de escapar de ese destino e intentará alcanzar la mayoría de edad lejos de su tutor para poder tomar posesión de sus bienes.

Blake Ravenscroft está llevando a cabo una misión en la que por varias razones ha puesto todo su empeño. La primera de ellas es vengar la muerte de su antiguo amor, Marabelle, fallecida años atrás, pero a la cual no ha conseguido olvidar. Y la segunda es su pretensión de que sea su última aportación al ministerio para el que estaba trabajando.

"Un error cambió nuestras vidas", creo que es la frase que mejor resume el desarrollo de la historia que nos cuenta Julia Quinn; puesto que Blake , que lleva un tiempo esperando atrapar a Carlotta de León, se encuentra ante la casa de Oliver Prewitt cuando Caroline escapa y la confusión en cuanto a la identidad de su "presa" es inmediata. Nuestra protagonista llevada por la necesidad, acepta ante Blake ser la espía que él busca, es la solución perfecta a su problema e intentará por todos los medios que Ravenscroft no descubra lo que intenta ocultar.

A partir de ese punto se suceden situaciones más o menos divertidas que nos colocan ante dos personajes diferentes y con puntos de vista distintos ante el mismo suceso. Mientras que Caroline busca el lado positivo a todo lo que le ocurre, Blake es negativo por naturaleza, y además se muestra amargado y resentido con todo lo que le rodea. Cuando Caroline se plantea un futuro con amor e hijos, Blake se plantea un futuro de soledad, en un intento de paliar el dolor que le produjo la pérdida de Marabelle. Sus conversaciones están salpicadas de diversión y sin embargo Blake no ha conseguido convencerme como personaje masculino, la mayor parte de las veces me ha parecido estar ante un partido de tenis, en el que la pelota va y viene sin parar.

Si tengo que quedarme con uno de los personajes me decido por Caroline, por su capacidad para adaptarse a las situaciones, sus ganas de seguir adelante y su forma de engañar a Blake. Gracias que Blake se retira después de esta misión porque como agente encubierto deja mucho que desear. La escritora intentando presentar un hombre con carisma y maduro consigue convertirlo en un títere, que la mayor parte de las veces me ha provocado hastío, su empecinamiento en anclarse en el pasado me ha aburrido y la forma de lanzarse al amor me ha resultado forzada. Qué manía tienen las escritoras de presentar protagonistas masculinos que luchan sin cuartel por evitar el amor y todo lo que tenga que ver con él, aún cuando sea evidente que su corazón les dicta lo contrario. No he conseguido entender en qué momento se enamora Blake de Caroline, me parece que a la autora se le fue la mano describiendo el amor que sentía por su antigua novia, me ha parecido excesivo recalcar tanto esta situación, y quizás por eso se me ha hecho muy difícil creer en el amor de Blake.

Este libro es el inicio de una nueva serie sobre agentes del gobierno, y destaca un secundario, James, amigo de Blake y muy importante en el desarrollo de este libro, que creo que será el siguiente protagonista. Y además me parece que la serie podría a su vez estar conectada con los Bridgerton, puesto que se menciona que es sobrino de Lady Danbury, aunque tengo que comprobarlo.

El libro tiene muchas de las características que han conseguido hacer de Julia Quinn una escritora aplaudida por las lectoras y querida por sus seguidoras, y sin embargo, y seguramente por ser de las primeras novelas que ha escrito, le falta profundizar y desarrollar mejor la historia que tiene entre manos. Para mí este libro está muy lejos de "El duque y yo" ó "El corazón de una Bridgerton", en este caso es muy evidente que el paso del tiempo ha mejorado su "saber hacer". Seguramente sus fans lo encontrarán muy divertido, y ciertamente tiene momentos graciosos; pero no ha conseguido cautivarme como lo hizo con otras historias.

Valoración: 2,5/5. Regular.