Cada vez que he leído una novela de Pamela Clare me parece que no podrá superar a la anterior, pero no es así, para mi es una serie que está yendo a más.

En esta entrega tenemos la historia de Nate y Megan, a ella la conocimos en el libro de Espósame, en el que el protagonista es su hermano Marc Hunter, ya en ese libro supimos de su historia, Megan tenía adicción a las drogas y acabó en un reformatorio, en el que sufrió múltiples violaciones, al salir volvió a recaer y dio con Donny que le proporcionaba la droga y la usaba, al final acabó embarazada y en la cárcel.

Ahora ha rehecho su vida, trabaja y vive para su hija Emily de cuatro años, aunque siente miedo y rechazo a los hombres en general piensa que no merece que nadie la quiera por lo que hizo en su juventud.

Nate fue herido en Afganistán , la parte izquierda de su cuerpo está llena de cicatrices, así como su alma, vio morir a varios de sus hombres y los que sobrevivieron quedaron profundamente heridos, además su novia lo abandonó después de sufrir el accidente, por lo que no quiere volver a enamorarse, ahora después de pasar por muchas operaciones se ha retirado al rancho familiar junto con su padre Jack, donde se ocupa de la cria y doma de caballos.

Cada vez que Nate baja al pueblo a entregar carne para los necesitados le gusta ver a Megan , que también trabaja como voluntaria, pero nunca han llegado a hablar, hasta que un día sale después de ella y ve que alguién se ha subido en el coche de Megan y la golpea, Nate aparece de repente y la defiende de Donny, convirtiendose en un héroe para ella .

Así comienza este libro que me ha de dejado maravillada, no es trepidante, ni lo que prevalece es la acción, pero es una bonita historia super romántica de segundas oportunidades.

Tanto Nate como Megan son personas heridas, a las que la vida no ha tratado demasiado bien, y les cuesta abrirse a los demás por miedo al rechazo.

La atracción entre los dos es inmediata, Megan ve más allá del físico de Nate, sabe ver bajo la piel a un hombre cariñoso, paciente y que se encariña enseguida con su hija, y Nate, que ya sabe del pasado de Megan, no le importa en absoluto, solo ve a la mujer en la que se ha convertido es dulce , tímida y entregada a su hija, quiere darle tiempo para que se acostumbre a él .

Como he dicho la historia es preciosa, muy romántica , hay mucha ternura y los protagonistas me han encantado desde el principio ,y que no decir de los secundarios, Jack, el padre de Nate, un buenazo también, que al principio se muestra un poco reticente al ver que su hijo se está prendando de Megan pero que al conocerla cambia de opinión, además de que Emily conquista su corazón enseguida , bueno el suyo y el de todo el mund , pues es un encanto de niña y le da mucha dulzura a la historia.

Otra cosa que me ha gustado es que aparecen todos los protagonistas de los libros anteriores, y vemos a un Marc muy protector con su hermana, entre ellos hay escenas muy emotivas también.

Además la autora al final nos deleita con un relato en el son protagonistas los seis "machotes" de esta serie , con el que me he divertido mucho .

A pesar de que el libro pertenece a una antología y es más corto de lo habitual , no he echado en falta nada , me ha parecido perfecto , es uno de esos libros que sé que de vez en cuando cogeré y lo reeleré por que es precioso.

Mi valoración 5/5

Tengo que decir que con esta serie tengo sentimientos encontrados, los tres primeros libros no me gustaron pero los tres últimos, me han encantado. Precisamente Bajo la piel no me duró el día aunque también es cierto que es una historia bastante más corta de lo que esperaba pero que he disfrutado mucho.

A Megan la conocimos en el tercer libro de la serie, Espósame, donde el protagonista era su hermano Marc, ahí pudimos descubrir los sufrimientos y padecimientos que Megan sufrió a lo largo de su corta vida, separada de su hermano siendo pequeña, adoptada por unos padres con una educación demasiado extricta, pasando por el reformatorio, los abusos recibidos, las drogas, la cárcel y tener a su hija Emily en una celda, y también vimos como Marc consigue un poco de paz para su hermana y donde a ambos se les da la oportunidad de una nueva vida donde poder ser felices. Marc lo ha conseguido y Megan tiene una vida bastante pacífica junto a su pequeña de cuatro años, con un trabajo, una casa y sobre todo a su hermano y la nueva familia de éste. Parece que todo va bien pero como suele pasar, el pasado siempre vuelve y esta vez llega de manera violenta.

Nate era un marine americano en Afganistán que debido a una explosión queda marcado de por vida con cicatrices que recorren la parte derecha de todo su cuerpo. Aunque han pasado cuatro años y se ha acostumbrado a las miradas de la gente, su vida se limita a trabajar en el rancho de su padre y las visitas a la cocina benéfica para donar carne. Ahí es donde conoce a la bella Megan que trabaja de manera voluntaria algunas noches a la semana, no sabe como se llama ni quien es, pero sólo verla lo anima. Hasta que una noche ve como es asaltada por unos desconocidos.

Como dije el pasado suele volver de la peor manera posible y cuando Megan se pensaba que podría tener una vida normal su vida vuelve a estar en peligro. Nate la salva esa noche y la protege sellando así lo que será una relación muy bonita y tierna entre dos personas heridas.

Megan siempre vivirá marcada por la dura vida que le tocó vivir en sus veintiocho años , no logra sacarse su terrible pasado de encima sabiendo que siempre la juzgarán primero por ser una expresidiaria y marcada a un nivel más emocional que le hace temer a casi todos los hombres. Sin embargo al lado de Nate se siente a salvo, tanto ella como Emily caen rendidas ante Nate y el padre éste, Nate la trata como se merece, no la juzga ni le recrimina sino que la ayuda a confiar y en tener esperanzas de una vida mejor , lo mismo que él, que tiene que acostumbrarse a que Megan lo acepta totalmente con cicatrices o sin ellas.

Si tiene un fallo este libro, es lo corto que es, una pena porque la historia vale la pena, también es cierto que aunque el libro de Marc no me gustó en su trama romántica, si era un buen libro que centraba la trama en un tema tan impactante y serio como los abusos y violaciones en los centros de menores, las cárceles, etc. Por eso es importante leer ese libro para comprender mejor a Megan y su historia. En cuanto a Bajo la piel, me ha gustado que se centrara en Megan y Nate , en la relación tan bonita que surge, muy tierna.

Muy bueno

Probablemente como muchas, tras leer Espósame y conocer la vida de Megan, deseé tener la oportunidad de tener entre mis manos una novela dedicada a ella.

A veces los deseos se hacen realidad, pues ésa es la que nos cuenta Bajo la piel: la historia de Megan Hunter y Nathaniel West.

A ambos se los podría describir como dos personas rotas, pero mientras las cicatrices de Megan están en su interior, fruto de un pasado de adicción y vejaciones, de soledad, prisión y culpabilidad, las de Nathaniel son exteriores y más visibles. Juntos, hallarán el modo de sanar.

O de eso trata esta historia. ¿Lo lograrán?

Megan es la hermana de Marc. Creo que es vital leer antes Espósame para poder entender y comprender al Marc Hunter que nos describe Skin deep. Es, ante todo, un hermano muy protector. Algo por lo que, tal vez, su comportamiento podría resultar un tanto excesivo, pero resulta comprensible si sabes por qué es así con Megan. Bueno... en realidad por qué son así todos, pues Julian también se nos presenta como uno de los protectores de Megan. Por eso hay que leer antes Espósame.

Han transcurrido varios años desde que Megan y Marc se reencontraran. La pequeña Emily tiene cuatro años. En este tiempo Megan ha construido una vida más o menos segura, pero ante todo estable para ella y su hija. Tiene un trabajo, una casa y suele colaborar como voluntaria en un centro de acogida. Es allí donde se encuentra con Nathaniel.

Nat es un ex-marine que regresó gravemente herido de Afghanistan. Una explosión acabó con la vida de varios de los hombres de su escuadrón, así como hirió y mutiló a otros. Nat sufrió graves quemaduras que le dejaron marcado parte del rostro y del cuerpo, de cintura para arriba. A su regreso y durante su convalecencia fue abandonado por su prometida. De modo que ahora el amor, e incluso la mera idea de entablar una relación sin ataduras, no forman parte de su vida, a pesar que su padre desea que conozca a mujeres, salga y deje de recluirse en el rancho familiar.

Tras abandonar las Fuerzas Especiales, Nat ayuda a su padre en el trabajo del rancho, especialmente entrenando a los caballos. Regularmente donan carne del ganado que crían a un centro de acogida y es allí donde Nat ve a Megan por primera vez.

Pese a su reticencia a acercarse a una mujer, no puede evitar sentirse atraído por Megan. A sus ojos es tan dulce y hermosa como un ángel. A causa de sus cicatrices teme acercarse a ella, teme su rechazo pero, inconscientemente, la busca.

Una noche es testigo de cómo un hombre trata de atacarla con un arma en su coche, y no sólo lo evita, salvándole la vida, sino que es herido en la pelea. El héroe que hay en él resurge y, desde entonces, comienza a implicarse en la seguridad de Megan y Emily, que enseguida conquista su corazón. Pese a su negativa, pese a que se dice que sólo actúa movido por su instinto como ex-marine, comienza a sentir como despierta a la vida de nuevo ... y como hombre.

Megan cree haber dejado atrás el pasado, un pasado que quisiera poder borrar. Pero cuando una noche alguien de ese pasado irrumpe en su tranquila y segura vida, el miedo la domina. Para su sorpresa cuenta con la protección no sólo de Marc y Julian, sino de ese extraño atractivo y marcado por cicatrices que la salva en el aparcamiento. Y por primera vez en su vida siente atracción por un hombre.

Éste es el punto de partida de esta novela.

Cronológicamente, Skin deep se sitúa después de Breaking point, pero ante todo, como digo antes, creo que es primordial leer antes Espósame.

Lo cierto es que la historia me ha parecido preciosa. Tanto es así que he estado varios días sintiendo mariposillas en el estómago cada vez que pensaba en la novela. Sí, no es muy extensa, pero tampoco te deja la sensación de ser una historia contada de manera apresurada o innecesaria. Al contrario, es esa novela que deseas leer simplemente porque te cuenta la romántica y conmovedora historia de un ex-marine y una joven ex-reclusa con cicatrices difíciles de curar.

Puede que tampoco parezca a priori una historia muy novedosa, sin embargo, en honor a la verdad, no recuerdo ninguna parecida sobre un ex-marine. Sí, de protagonistas con algún tipo de desfiguración. En cualquier caso, creo que la magia de este novela se encuentra en unir a Megan y Nathaniel.

A Megan ya la conocimos en la novela de Marc y Sophie, supimos de su infancia, su adolescencia y como su adicción a las drogas la llevó a la cárcel. Con un bagaje así, me resultaba bastante inconcebible que diera como resultado una novela tan bonita, sin ese halo sórdido o angustioso que, tal vez, cabría esperar.

Es cierto que la aparición de Donny, el hombre que la introdujo en las drogas, supone una amenaza para ella, pues amenaza no sólo su vida sino también la de Emily. Y el que empiece a sentirse atraída, por primera vez, en un hombre le asusta. Pero Nathaniel, precisamente por su pasado, por el alcance de sus heridas y por el sufrimiento propio que ha padecido, se convierte en su mayor apoyo y en alguien, junto al que poder comenzar de nuevo.

Skin deep me ha parecido una novela muy romántica que habla de segundas oportunidades. Segundas oportunidades en el sentido no de retomar una relación de pareja, sino de comenzar una nueva vida. Tanto Megan como Nathaniel cargan con unas terribles cicatrices. Las de Megan están ocultas; algunas de las de Nat también, pero también están las físicas. Juntos pueden encontrar una oportunidad que no esperaban, y que la presencia de Donny amenaza. Como es habitual en esta serie, existe esa vertiente de acción y thriller. No sólo por el pasado y el entrenamiento militar de Nat, sino por todo cuanto rodea al Equipo de investigación, el trabajo de Marc y el Julian.

Además la novela cuenta con un plantel de personajes secundarios de lujo: los ya mencionados Marc y Julian, McBride, Sophie... Tengo que destacar a Jack West, el padre de Nat que me ha parecido un personaje entrañable, cuya presencia siempre actúa como un bálsamo en muchas ocasiones y a la pequeña Emily que con su dulzura y espontaneidad introduce la nota tierna en Skin deep. Más tierna aún si cabe. Gran parte de la novela transcurre en el Rancho Cimarron, el rancho de Jack y Nathaniel West, un entorno precioso que da lugar a escenas inolvidables.

Con Bajo la piel he disfrutado de una lectura deliciosa, pues narra una historia romántica que ha logrado tocarme la fibra. No sólo por la relación de Nat y Megan, sino por cómo se conocen, se acercan, cómo cambian las cosas... Al tratarse de una novela corta todo gira en torno a ellos, hay pocas escenas de acción. Las justas que requiere la historia.

En mi opinión la de Megan y Nat es una historia de esas que sin una trama muy enrevesada, única y exclusivamente por sus personajes, logra meterse bajo tu piel.