
Una hermosa mañana de domingo me puse a organizar mi biblioteca y allí estaban: El beso del highlander, El beso de la noche, Un beso inolvidable, La huella de un beso, El beso carmesí, El beso del rey demonio…
Por un momento me quedé mirando esos libros y pensé, “¿qué tienen en común además de ser títulos de novelas románticas?”. Sí, exactamente, que todas nos hablan de un beso. ¿Quién no ha recibido o ha entregado un beso en esta vida?
Todo ser humano sabe besar y todos necesitamos besar y que nos besen pero, ¿besamos todos igual?Con esa pregunta en mi mente me puse a investigar y me encontré con mucho de lo que ya sabía y con otras tantas cosas que desconocía.
Lo primero es que hay su correspondiente clasificación de besos. Hay besos tradicionales, interesantes, insinuantes, directos, apretados, húmedos, absorbentes, hollywoodenses, butterfly, esquimales, de tú uno y yo el otro, de toma todo y de yo te sigo, y todos ellos cuentan con su correspondiente explicación de cómo llevarlos a cabo.

Lo segundo de lo que me enteré es que el significado de los besos también estaba tipificado. El beso en la mano significa ternura y deseos de sentirse querido. El beso en el cuello es sinónimo de pasión y desenfreno. El beso en la oreja que juega y que su sentimiento probablemente no es genuino. En el beso en el cabello hay dependencia y necesidad de tenerte para siempre. Un beso en los ojos indica la ternura y uno con los ojos cerrados dice mucho de la ensoñación y la entrega del amante. Todas nos podemos imaginar que en un beso robado hay timidez y que en un beso en la frente hay un cierto grado de sumisión y también sentido de protección. Igual que hay sincera amistad en un beso en la mejilla. Bueno, esto siempre y cuando el que te lo dé no sea un tal “Judas”.
Pero aparte de todo esto, los besos también tienen sus curiosidades. Por si os interesan aquí os dejo algunas, pero hay muchas más.
- Si el primer beso es bueno, es más alta la probabilidad de que puedas tener una relación a largo plazo con ese hombre.
- En los labios tenemos la segunda densidad más grande de terminaciones nerviosas del cuerpo -primero están las manos-.
- Los besos intensos disparan la presión sanguínea, dilatan las pupilas, la respiración se profundiza y el deseo que causa suprime la conciencia del individuo sobre sí mismo, tal como la acción de algunas drogas.
- Las mujeres necesitan más información emocional que los hombres para que un beso les estimule sexualmente
- Al besar cerramos los ojos porque se produce una gran dilatación en las pupilas y el cerebro nos impulsa a entornarlos.
- Besar con pasión durante diez minutos quema 150 calorías
- El primer beso de película fue entre John C. Rise y May Irwin en el film llamado El beso, allá por 1896
- La piel de los labios es el único trozo de epidermis idéntico en hombres y mujeres.
- Aseguran que si logras hacer un nudo con el tallo de la cereza sólo con tu lengua, sin tocarlo con las manos, significa que sabes besar bien.

Literatura, escultura, pintura, cine… Los besos son y serán siempre parte de nosotros. No hay nada más hermoso y que derrochemos con mayor alegría. Y es que, a través de ellos, entregamos el alma, el corazón y la propia vida. A nadie le debería faltar un beso al nacer y, mucho menos, uno en la despedida.
Y dicho esto, como comprenderéis, es de obligado cumplimiento mencionar ese gran beso que te ha marcado. ¿Cuál mejor que el sublime beso que podemos encontrar en una serie de la BBC basada en la novela Norte y Sur de Elizabeth Gaskell? Sinceramente, yo no lo conozco. Si tenéis ocasión de ver esta serie no os la perdáis, realmente, merece la pena.
Y para vosotras ¿Cuál es ese sublime beso que os ha marcado de la literatura romántica o del cine?
La fotografía que acompaña al artículo es una escena de la mini serie serie Norte y sur.
El resto de imágenes del artículos son de Pixabay.es